Introducción
Ya saben por dónde viene esta partida. Ya llevo dos años en el club, logré cierta armonía en el equipo y su táctica, superé los objetivos planteados por la directiva y quedé en la puerta de la zona de promoción. Todo indica que este año voy por el ascenso y la gloria absoluta… pero como siempre sucede cuando pensas que te las sabés todas, viene la realidad a darte una cachetada de humildad.
Temporada 3: La gran Lavolpe en Boca
Ya en la pretemporada hacia mi 3º año en el URSL Visé, el 9 histórico del club Enzo Celestine, quien quedara relegado por la llegada de Gillian Vaesen (que funcionó mil veces mejor), empezó a quejarse y a dividir el vestuario por no jugar lo suficiente.
En mi primer temporada había recibido desplantes de jugadores influyentes teniendo que ceder por mi nula reputación y mal ambiente, pero habiendo dejado 5º al club decidí sacar pecho y plantarme.
Como suele pasar en el juego, primero charla privada pidiendo titularidad y frente a la negativa (lo mandé a jugar en reserva y hacerse su lugar) se vino la reunión de equipo con todo el plantel en contra exceptuando a Vaesen que estaba feliz de mi enemistad con su competidor. Frente a todos me volví a plantar y, para mi sorpresa, tuve el 100% de adhesión y Celestine dejó de quejarse, empezando a bajar su influencia en el equipo. Así y todo iba a seguir en el equipo porque tenía contrato por 2 años más. A jugar con los nenes y listo.
Habiendo resuelto esta situación saliendo airoso, me decidí a armar el equipo para lo que viene, ya que como bien les conté, es casi imposible mantener un mismo plantel con el Visé por dificultad en retener jugadores.
Seguí con mis altas y bajas en el mercado y logré mi única transferencia por plata en el Visé (€24k por Matisse Thuys, quise negociar y me fué imposible), que sumado a mi economía de guerra permitió que la dirigencia me pague mi primer curso de Coach.
Aca se viene el primer y (creo que) único error garrafal de esta temporada: pasé de un 4-2-3-1 clásico a un 4-3-1-2 sin extremos. ¿El motivo? Quería jugar con 2 delanteros para ser más ofensivo y ascender, y pensé que reforzando el medio con 2 Mezzala me iba a funcionar. El real motivo? Me la creí y pensé que estaba en momento de inventar formaciones sin perjuicio. Lo peor de esta decisión es que me saqué de encima los wings y contraté más medios.
Conclusión: terminé la primera rueda cerca de zona de descenso, sin regularidad en los partidos y con la dirigencia pidiéndome explicaciones, el clásico “5 partidos para mantener el puesto”.
Hice la gran Lavolpe cuando agarro a Boca 2006: faltaban 14 partidos y Boca era puntero cómodo cuando Lavolpe comenzó a dirigir el equipo; cambió todo y usó su propia táctica, y el equipo le dió la espalda perdiendo los últimos 2 partidos y la final contra Estudiantes. Perdió por soberbio
Acá me pasó similar: venía de salir 5º, la táctica venía bien y, por modificarla radicalmente, casi me rajan. Por suerte dejé de ser testarudo y volví a mi tactica original. Tuve que jugar con wings inventados, generalmente delanteros reconvertidos temporalmente o newgens que no daban con la talla, y por suerte lo hicimos andar.
Terminé el torneo en 6º posición lejos del pelotón de ascenso. Torneo digno teniendo en cuenta lo sucedido y encima mi volante central newgen ganó el premio al mejor juvenil de la liga.
Lo interesante es que, durante este período de crisis, recibí 3 o 4 entrevistas de equipos de 1ª de Bélgica, con los cuales tuve entrevistas para ver si estaba a la altura y por suerte no quedé en ninguno. Realmente no deseaba dejar al Visé después de tan mala racha y mi contrato aún estaba vigente. Irme en ese momento hubiera sido un fracaso y abandono..
El último detalle a comentar de esta temporada involucra al primer mencionado aquí: Enzo Celestine.
A las pocas fechas del torneo me doy cuenta que este mediopelo había sido convertido en ÍCONO DEL CLUB. Es el único jugador/empleado que figura dentro de la historia de la institución, y justamente es el delantero que no quiero ni ver. Esto me obligó a volver a considerarlo dentro del equipo estando en la 4ta fecha. Lo subí a primera y empecé a ponerlo de titular (estaba jugando con 2 delanteros, no molestaba tanto) y luego con el cambio de formación y teniendo que reconvertir otros delanteros a wings, pude mantenerlo un poco más de titular. Habiendo sucedido esto, logré que vuelva a sentirse feliz en el Visé y deje de quejarse.
Temporada 4: Fin de contrato y quiero mi estatua.
Año nuevo, vida nueva y muchas emociones. En esta temporada se vence mi contrato y no voy a renovarlo. Cuatro años fueron suficientes en el Visé y es tiempo de soltar, irse triunfador y crecer.
Ahora a focalizarnos en la temporada triunfal. En el mercado de pases me focalicé en reforzar los wings y algún delantero bueno ya que pese a lo sucedido con el Ícono Enzo Celestine, volvi con mi idea original de relegarlo a reserva, con lo cual necesito recambio en esa posición.
Arrancamos la temporada en coincidencia con el primer update del Match Engine del juego (20.2.4), algo que no debería influir demasiado aunque en mi caso así fué: La táctica que venía funcionando pasó a ser irregular y sin reflejar en el campo la idea de juego plasmada en las instrucciones. Un equipo acostumbrado a pase corto pasó a ser un equipo que salteaba el mediocampo con pelotazos de los centrales hacia ningún lugar. Fué tan evidente el cambio y mi imposibilidad para corregirlo con distintas variantes que acudí al grupo de Discord de FMAdictos y, analizando la táctica con algunos de los muchachos, me dí cuenta que había instrucciones contradictorias para el estilo de juego buscado y que se vieron en evidencia con el cambio del ME. Implementé alguno de los cambios sugeridos y el equipo volvió a funcionar mejor que antes y manteniendo el estilo que yo buscaba. No es que el ME me había perjudicado, sino que se había puesto más realista y los errores que antes me dejaba pasar, ya no lo permitía y eso se veía en el campo (no existe el complot en el juego, muchachos).
Ya estamos, corregimos la táctica y quedan ¾ de torneo para salir de la mitad y posar para la estatua. Las cosas se empezaron a encaminar con empates y victorias por la mínima, hasta que empezó a ser solo victorias y a subir en la tabla de posiciones. De repente estamos en la fecha 23 de 30, acumulando 16 partidos invictos (récord) y en la 4ta posición a 9 puntos del líder Sporting Lokeren (equipo profesional) que oh casualidad es nuestro próximo rival. El famoso partido “acá vamos a ver para qué estamos y de qué estamos hechos”. Partido algo parejo pero perdimos 2 a 1 sin injusticia alguna, perdiendo así el invicto y quedando en 5ta posición fuera de la zona de promoción. Lo peor no fue el golpe en sí, sino los que vinieron a patearme en el piso: partido siguiente contra el 4to (FCV Dender, perdí) y luego contra el 2do (Tubize, empate). Desde ahí fue mediocridad en los 4 partidos siguientes y terminé 5to a 3 puntos de la promo. Esa seguidilla de 3 partidos letales le bajó la moral al equipo y yo me caí anímicamente. En cualquier otro juego de fútbol te armas un partido rápido y te desquitás como mejor lo sientas. Acá eso no existe, acá tenés que terminar ese torneo o renunciar y solo te resta pensar en tu futuro. Acá se fué el tren y tu equipo terminó pasando las semanas mientras el resto jugaba el ascenso. Fue tal mi desánimo que terminó la liga, terminó mi contrato y me fuí de vacaciones esperando mi nuevo club sin importarme si tuve alguna figura, revelación o record en particular.
Debo confesar que en la senda ganadora, y particularmente en la previa al partido con Lokeren, dudé en convocar una reunión de equipo para felicitar o mismo para remarcar la importancia del partido. Es algo que suelo hacer, pero venía de mala experiencia y como felicitar a los equipos está casi prohibido por la comunidad FM, esta vez decidí no hacerlo y el resultado habla por sí solo. Seguro hubiera pasado lo mismo si hacía la charla y después sería de los que reniegan de eso, pero era una charla necesaria que omití.
Se acabó mi estadía en el URSL Visé. Nunca había dirigido en esta liga y con un equipo en tanta desventaja, y estuvo buenisimo. En las 3 temporadas completas que dirigí al equipo siempre cumplí con la visión largo plazo con 5 años de antelación y los deje siempre en la puerta de la Promoción.
Me han contactado otros equipos durante esta última temporada, incluyendo el Anderlecht de la Jupiler Pro League (1era de Bélgica) pero rechace todas las entrevistas porque yo cumplo los contratos. Una vez desempleado me contactaron de mayores divisiones, pero como no volveré a pasar por esta liga y la quiero ganar con ascenso incluido, esperé hasta que finalmente acepté un nuevo club que comentaré en la próxima edición de esta Partida Purista.
Por último, les dejo la evolución del Manager en estos 4 años.